domingo, 8 de noviembre de 2015

Opinión sobre la educación en México.



OPINIÓN SOBRE LA EDUCACIÓN EN MÉXICO.
Dilery Guadalupe OCAÑA SÁNCHEZ.


La educación posee una multitud de rubros sobre los que puede reflexionarse. La gran mayoría de temas relacionados con el proceso educativo son de suma importancia porque la educación despliega una realidad que gestiona la transformación y el desarrollo de la sociedad.  Educación es una palabra proveniente del latín educere ‘sacar, extraer’ o educare ‘formar, instruir’ la cual se define como un proceso a través del cual se pretende enseñar a todos los individuos que conforman el país a desplegarse e integrase en la sociedad, como una persona productiva; otorgándole mediante esta formación las bases para desarrollarse en una vida laboral triunfante y al mismo tiempo sea capaz de compensar sus propias necesidades.
 “La baja calidad de la educación en México ha sido un obstáculo para el crecimiento y el desarrollo, inhibiendo la posibilidad de reducir los niveles de desigualdad y pobreza, sostuvo el Centro de Estudios Económicos del Sector Privado”[1], lo cual considero una realidad que sigue vigente hasta la actualidad, a pesar de que se implementen nuevas reformas; estas no son dirigidas a establecer un sistema educativo que solucione problemas de raíz como lo son la corrupción, la falta de transparencia, el respeto y la falta de valores.
            “El sistema de educación es una estructura, que de base tiene los principios, las normas y procedimientos que rigen la manera que se forman los nuevos integrantes de la sociedad”[2], en mi opinión y en la de muchos, este ha tenido muchas insuficiencias y es uno de los motivos que nos ha conducido a la crisis actual, pobreza, desigualdades y analfabetismo.
            La Educación es un instrumento para el desarrollo de cualquier país, por lo tanto se registra al sistema educativo nacional como la estructura socioeconómica y política que interactúa de manera directa con las necesidades y exigencias del propio país para su desarrollo.
 Desde sus comienzos de nuestro país como estado independiente; la Educación ha permanecido como un tema de importancia pues vista como un factor de producción y la mejor estrategia para atender los problemas económicos del país y como eliminador de las desigualdades.
¿Quién es la persona encargada de hacer que se cumpla al pie de la letra lo que en la Ley General de Educación establece? Lo que siempre escuchamos desde nuestros primeros años de formación académica es que la educación es laica, gratuita y obligatoria… sin embargo, ¿Cuál es la realidad en México? Ni la educación es totalmente gratuita, ni tiene acceso a ella toda la población, ni mucho menos ha logrado la igualdad social y hablando de su contribución para el desarrollo del país, ha sido limitado. Podemos responsabilizar al gobierno, a los alumnos, a los maestros y hasta los padres de familia para explicar las deficiencias y fracasos del sistema educativo. El momento de buscar siempre responsables sobre ello ha quedado atrás, tomemos conciencia y hagamos frente a la parte que a cada uno nos corresponde asumiendo nuestra responsabilidad en los diferentes roles que día a día vivimos.
Es cierto que el gobierno ha fallado en no proporcionar la calidad de educación que la población necesita, pero al igual nosotros hemos fallado por no saber exigir esa educación de calidad y gratuita que es una garantía descrita en nuestra constitución. Es momento como antes lo mencione, de tomar las riendas de nuestros caminos con responsabilidad y enfocarnos en ser y hacer personas emprendedoras, motivadas, con ganas de cada día superarse; y todo ello se empieza haciéndolo desde el hogar; sin miedos ni pretextos para sembrar la semilla de un mejor futuro para los jóvenes y no seguir teniendo esa “suerte” a la que muchos y por cultura estamos acostumbrados. Es necesario cambiar nuestra mentalidad para formar material humano con calidad y exigencias, y así aprovechar al máximo los recursos que están a nuestro alcance.
“La educación es el arma más poderosa que puedes usar para cambiar el mundo” decía Nelson Mandela, el conocimiento sin duda es esencial para el mejoramiento de las circunstancias de vida de nuestra población y seguirá siendo un integrante forzoso para la lucha contra la ignorancia y las desigualdades.
En otro orden de ideas cabe mencionar que la si mala calidad y equidad educativa si bien es cierto es uno de los principales factores que limitan no solo al individuo si no al país a la competitividad, y esto es el reflejo mismo de los resultados catastróficos en los últimos años en los diferentes niveles educativos por no poder sobresalir como país de manera adecuada… vuelvo a mi pregunta ¿Quién es la persona encargada de hacer que se cumpla al pie de la letra lo que en la Ley General de Educación establece? Aun con miles de reformas es necesario centrarse en los requisitos que ayudarían a mejorar las acciones para aumentar la calidad de las escuelas y de los estudiantes en nuestro país; y lo anterior solo se podrá llevar acabo si los ejecutores, principalmente docentes; cumplen con dichos requisitos; como  por ejemplo: definir los estándares a seguir por los docentes para que la sociedad sepa cuál es la enseñanza eficaz que se debe seguir, fortalecer la formación del docente estandarizando la enseñanza inicial con valores, adecuar cursos de desarrollo profesional docente basándose principalmente en las necesidades que lleguen a tener las escuelas, estandarizar el sistema de evaluación docente de tal manera que al final sea reconocido el esfuerzo de este y así miso penalizar al que sea mal integrante,  definir parámetros claros de gestión, habilidades, valores y liderazgo en el entorno escolar, construir un liderazgo institucional entre escuelas para el fácil desarrollo de unas con otras y tener una red de mejora continua en todas y cada una de las instituciones, y a su vez incrementar la autonomía escolar para tener como garantía el funcionamiento de todas las escuelas evitando la discriminación de algunas zonas con respecto a la distribución de recursos que se destinan a las mismas, y por último fortalecer la participación social sobre los aspecto más importantes donde se asienta más las necesidades de la zona siendo el medio para ello los consejos escolares[3].
Cuando un emprendedor busca el cambio, responde a él y explota sus oportunidades, se habla de un emprendedor efectivo; decía Peter Drucker en 1964, convierte una fuente en recurso; esforzarse es la palabra adecuada para ser mejores humanos, personas y también ciudadanos. Vivimos en un mundo donde el que no aprende es porque no quiere, tan simple como eso, pues la calidad de la educación nosotros mismos podemos mejorarla; somos nosotros los jóvenes el presente y el futuro de un país que tiene todo para ser de primer mundo… todos soñamos con el éxito, pero para que ello suceda hay que cambiarse el chip de ser emprendedores y empezar por nosotros mismos el cambio porque no hay fórmulas secretas para lograr el éxito, creer en la posibilidad de tener un mundo mejor, modificar nuestros pensamientos y ser una sociedad que avanza con los pocos o muchos recursos con los que contemos.
 La importancia de la Calidad Educativa es primordial para que la capacidad del país incremente las oportunidades económicas y la movilidad social de la población, y como pilares fundamentales para que suceda todo lo anterior encontramos a la fuerza laboral docente, directores, las familias y principalmente los estudiantes que son la base para que esto se dé; si queremos visualizarnos un futuro como una economía importante y mover nuestra posición actual hay que actuar.
Hay que asegurarnos que si suceda, recordemos toda educación nace en el hogar con nuestros docentes de casa (Nuestros padres de familia). Para establecer la educación formativa (Valores).

REFERENCIAS:

·         Andere, E. (2013). La Escuela Rota. http://biblio3.url.edu.gt/Libros/didactica_general/1rota
·         es.wikipedia.org. (14 de Enero de 2015). Consultado el 6 de Noviembre de 2015,de http://es.wikipedia.org/wiki/Sistema_educativo_de_M%C3%A9xico
·         Notimex. (18 de Diciembre de 2014). Recuperado el 18 de Enero de 2015, de yucatan.com.mx: http://yucatan.com.mx/mexico/educacion-mexico/emilio-chuayffet-cambia-la-educacion-en-mexico



[1] (Notimex, jornada.unam.mx, 2013)
[2] (es.wikipedia.org, 2015)
[3] Andere, E. (2013). La Escuela Rota. http://biblio3.url.edu.gt/Libros/didactica_general/1rota

Procesos Didácticos del Derecho: LA EVALUACION DE PLANES Y PROGRMAS DE ESTUDIO EN L...

Procesos Didácticos del Derecho: LA EVALUACION DE PLANES Y PROGRMAS DE ESTUDIO EN L...: LA EVALUACIÓN DE PLANES Y PROGRAMAS DE ESTUDIO   EN LAS UNIVERSIDADES MEXICANAS, COMO ELEMENTO PARA ELEVAR LA CALIDAD DE LA EDUCACIÓN ...



En efecto hablar de calidad en la educación pública es un tema muy complejo; yo creo que si bien cierto es, la educación es una función a cargo del estado, también es que el estado no le da la importancia que requiere, ya que como bien establece Ivon, las metodologías no están debidamente trazadas en base a una calidad o mejor dicho en procesos de mejora continua que nos conduzcan a una educación de excelencia.

Procesos Didácticos del Derecho: EL USO DE LASTECNOLOGÍAS DE LA INFORMACIÓN Y COMUN...

Procesos Didácticos del Derecho: EL USO DE LASTECNOLOGÍAS DE LA INFORMACIÓN Y COMUN...: EL USO DE LAS TECNOLOGÍAS DE LA INFORMACIÓN Y COMUNICACIÓN, COMO MEDIO TRANSMISOR DEL CONOCIMIENTO Víctor Hugo ALEGRÍA CORDERO.  ...



Muy de acuerdo, en verdad estoy convencido que poco a poco, a un ritmo vertiginoso las tecnologías de la información y comunicación están alcanzando una gran importancia en todos los aspecto y la educación no pasa desapercibida. En efecto considero que en un tiempo no muy lejano el 100% del país debe de contar con cobertura de internet, hecho que se traducirá en desarrollo y fuentes de oportunidad para tener acceso a la información y así poder tener el conocimiento a nuestro alcance.

LAS TECNOLOGIAS DE LA INFORMACION Y COMUNICACION EN LA EDUCACION

LAS TECNOLOGÍAS DE LA INOFORMACIÓN Y COMUNICACIÓN
EN LA EDUCACIÓN
José Luis GÓMEZ MUNGUIA
Introducción.
Con el presente trabajo pretendo establecer lo necesaria que son las estrategias de aprendizaje dentro de los ambientes virtuales de aprendizaje; por lo tanto partiremos desde un punto de vista general a uno particular.
En efecto la educación día a día ha venido evolucionando, como preámbulo al presente trabajo debo de partir de dos premisas a mi consideración importantes, la primera, considero que soy parte de la generación donde la sociedad ha evolucionado de dejar las máquinas de escribir y pasar a la era de la computación; y la segunda, conformo parte del matriculado de una Universidad Virtual y he estudiado algunos cursos vía electrónica, por lo tanto tengo un panorama de lo que son las Tecnologías de la Información y Comunicación aplicadas a la educación:
Sin duda alguna, hablar de educación, es hablar de aprendizaje, y hablar de aprendizaje es hablar que pedagógicamente existen diferentes formas de aprender, por lo tanto al estar enfocados en un sistema de educación virtual estamos obligados a aprender a aprender; lo anterior nos obliga a utilizar una serie de herramientas pedagógicas las cuales van estrechamente relacionadas con las fortalezas y debilidades que cada ser humano tiene. De manera específica estamos hablando del desarrollo de las competencias básicas computacionales, de la comprensión lectora, de la composición escrita y del pensamiento crítico y propositivo. En ese contexto se puede determinar que dentro del proceso de aprendizaje, es necesario saber lo que se va aprender, como se va aprender, porque se va aprender y para que se vaya aprender; para tal efecto tenemos que hacer uso de los mejores medios, tecnologías y formas de aprendizaje que para cada sujeto se adecúe. Lo anterior repercutirá en un mejor nivel de aprendizaje y de vida.
Así, desde la visión conductista se plantea el aprendizaje como una forma de adquisición de respuestas, donde el estudiante es visto como una tabla rasa; es pasivo, pero debe hacer un cambio en su conducta y el profesor es considerado como aquel que proporciona los estímulos, sean castigos o refuerzos; sin embargo una perspectiva más cognitiva cambia el sentido del aprendizaje, el cual es visto como una forma de adquisición de conocimientos, donde el estudiante es menos pasivo y sigue siendo visto como una tabla rasa, vacía, donde el profesor transmite sus conocimientos; además la evaluación es realizada con base en la cantidad de información que disponga. Finalmente, un enfoque más constructivista plantea la idea del aprendizaje como un proceso de construcción o reestructuración de la información, en donde el estudiante es activo, dotado de conocimientos previos que va a utilizar con ayuda del profesor, quien será más que transmisor, un facilitador de la comprensión e interpretación de los conocimientos; de manera que la evaluación sea del uso que se le dé al conocimiento, la puesta en práctica o capacidad de transferir los aprendizajes a otros contextos[1]. Con lo antes descrito en párrafos anteriores podemos establecer que nuestro objetivo primordial es generar aprendizaje, entendido este como: el proceso a través del cual se adquieren conocimientos, habilidades, actitudes o valores.[2]
No omito manifestar que la Organización de las Naciones Unidas para la Educación (UNESCO), en su informe mundial sobre la educación de 1998, señala que los entornos de aprendizaje virtuales constituyen una forma totalmente nueva de tecnología educativa y ofrecen una compleja serie de oportunidades y tareas a las instituciones de enseñanza de todo el mundo, el entorno de aprendizaje virtual lo define como un programa informático interactivo de carácter pedagógico que posee una capacidad de comunicación integrada.[3]
En pocas palabras estamos hablando de un tema alfabetización tecnológica, mismo que va de la mano de un trabajo de planificación y gestión de la enseñanza, donde haciendo uso de las técnicas pedagógicas de aprendizaje y de nuestras habilidades desarrolladas y por desarrollar, con el apoyo de la tecnología como vía para estar conectados al mundo de la información, podremos generar nuestros propios estilos, modos o maneras de aprender. Para lograr lo antes descrito bastará con el simple hecho de tener una computadora con acceso a internet.
En conclusión, las Tecnologías de Información y Comunicación en conjunto con la pedagogía, en nuestra actualidad han venido a erigirse como la alternativa más eficiente, para garantizar un acceso real a la educación. Además que rompe con los esquemas tradicionales de la educación, aumenta la destreza mental y operativa en los procedimientos de la información, convierte a los usuarios en creadores y consumidores de información, proporciona participación activa en el proceso de enseñanza-aprendizaje; entre muchos otros. Todo lo anterior con la única finalidad de generar una sociedad del conocimiento. Dicha sociedad de conocimiento lleva Implica la responsabilidad de usar un software relacionado con ambientes informáticos pedagógicamente diseñados para facilitar la asimilación y comprensión de información; sin pasar por alto que para que dicha asimilación de conocimientos se vaya generando necesita el auxilio de otras ramas relacionas en la forma de como el estudiante va tomando la información dada, es decir como administra su tiempo versus con el cumulo de lo que tiene que aprender.
            Así pues, el uso de los nuevos avances tecnológicos como instrumentos pedagógicos de aprendizaje, permiten el acceso a grandes cantidades de información, con la que se pretende retroalimentrar y fomentar los procesos de comunicación, los que se traducirán en aprendizaje.


[1] Juárez Castañeda, Paulina. (2008). ¿Qué son las estrategias de aprendizaje? [Notas de clase]. México: Universidad Autónoma de Chiapas
[2] Sánchez, Baldinú. (2007). ¿Qué es aprender a aprender? México: Universidad Autónoma de Chiapas
[3] Vila Muñoz, Patricia. (1999). Aprendizaje con nuevas tecnologías. Paradigma emergente. Extraído el 28 de octubre de 2012, de http://investigacion.ilce.edu.mx/panel_control/doc/c37aprendizaje.pdf

LA EVALUACION DE PLANES Y PROGRMAS DE ESTUDIO EN LAS UNIVERSIDADES MEXICANAS, COMO ELEMENTO PARA ELEVAR LA CALIDAD DE LA EDUCACION


LA EVALUACIÓN DE PLANES Y PROGRAMAS DE ESTUDIO  EN LAS UNIVERSIDADES MEXICANAS, COMO ELEMENTO PARA ELEVAR LA CALIDAD DE LA EDUCACIÓN

Ivonne MORALES AGUILAR

Los planes y/o programas de estudio son la espina dorsal del camino que recorrerá un estudiante al cursar una licenciatura, por lo que es importante que éstos sean de calidad y se encuentren actualizados, es decir, que cubran los requisitos mínimos que el mercado laboral y la sociedad necesitará de un egresado.  Una buena y constante evaluación de ellos, permitirá elevar la calidad de educación, lo que a su vez se verá reflejado en el mejor desempeño de la actividad profesional y abonará al crecimiento del país.  El presente ensayo pretende describir de forma breve, los principales obstáculos a los que se enfrenta la evaluación de la educación, los criterios metodológicos que deberá abarcar para que ésta se realice de manera eficiente y la transformación que las Universidades deben tener a una visión de calidad con un enfoque basado en competencias.

Un plan de estudios tiene como propósito formar egresados de calidad, esto es, que posean conocimientos, habilidades, actitudes y valores que fueron señalados en el perfil de egreso, por lo que evaluar éste aprendizaje es esencial.  Partiendo de este punto, es necesario definir, la importancia de la calidad en la educación. Tobón, (2006), afirma, que el fin de buscar la calidad en las universidades, es establecer mecanismos para asegurar la pertinencia y permanencia de los procesos de docencia, investigación y extensión, funciones centrales de la educación superior.

En México, la Secretaría de Educación Pública, es la encargada de autorizar –y evaluar- los planes y programas de estudios, pero en la práctica, la actividad se centra en autorizar nuevos programas o actualizar los existentes, ya que la visión de la secretaría se basa en obtener indicadores de manera cuantitativa (número de egresados), y no cualitativa (calidad de la educación), lo que ha generado: 1)Que exista una mayor oferta de egresados con títulos profesionales; 2)Que el mercado laboral se abarate –profesionales sobrecalificados ocupando puestos de menores rangos, con salarios bajos-; 3)Que la tarea de evaluación sea una decisión de cada institución educativa. 

             Para, Villa (2004), “La evaluación tiene el propósito de mejorar el programa educativo, lo que deberá estar claramente reflejado en los criterios y metodologías que se diseñen para llevarla a cabo”, es decir, existen diferentes tipos de evaluaciones dependiendo del objetivo que pretendan alcanzar.  

Según el “Manual para el rediseño de planes y programas en el marco del nuevo modelo educativo y académico del IPN”,  la metodología que se debe utilizar es la que permita evaluar los siguientes aspectos: Concordancia de los contenidos seleccionados con los referentes institucionales y externos; congruencia de la propuesta curricular y las necesidades que se pretenden satisfacer; vigencia de los referentes externos (avances en el conocimiento, desarrollo de nuevas metodologías y técnicas, nuevas tendencias en el ejercicio de la profesión); congruencia de los contenidos del plan de estudios con el perfil del egresado y los objetivos curriculares; idoneidad de la estructura del plan de estudios para obtener los resultados esperados; resultados obtenidos en cuanto a la capacidad del programa para retener estudiantes y a la capacidad de sus egresados; suficiencia de los recursos destinados al programa; y correspondencia de los recursos utilizados y los recursos obtenidos.  Partiendo de ésta idea de evaluación podemos destacar que ésta no solo se basa en la forma, sino que la metodología utilizada debe considerar aspectos  que analicen el fondo del programa o plan de estudios (¿Qué, cómo, cuándo, dónde y por qué?).

Para obtener una evaluación más objetiva y para mejorar la percepción de su imagen ante la sociedad, algunas instituciones están optando por la certificación de sus planes y programas de estudio.  Las certificaciones las están llevando acabo asociaciones civiles que generalmente utilizan metodologías basadas en resultados, es decir, solicitar evidencias históricas de los resultados obtenidos con los proceso implementados; pero éste tipo de metodología de certificación es muy fácilmente vulnerable, debido a que las “evidencias” se pueden crear; por lo que para elevar el grado de confianza en la certificación, es necesario utilizar una metodología basada en  procesos, en ésta, el principal objetivo no es verificar los resultados obtenidos (números), sino certificar que los procesos se realizan de manera estandarizada -independientemente de que persona lo realiza-, logrando de esta manera obtener resultados estandarizados. Es decir, asegura que el proceso de enseñanza-aprendizaje es igual para cualquier estudiante que este cursando el programa de estudio certificado.

Si la SEP, promoviera la implementación de certificaciones de planes y programas educativos basados en una metodología de procesos, podría  controlar los resultados obtenidos en la enseñanza-aprendizaje,  de los programas de estudio de todas las instituciones, y por ende elevar la calidad de la educación.  De esta manera podría modificar visión cuantitativa a una cualitativa.

Existen además planes educativos evaluados a nivel mundial en algunas ramas específicas del conocimiento; como es el caso de la evaluación de posgrados elaborada por: El Global Executive MBA Ranking 2015 de “Financial Time”, que es considerado como la referencia a nivel mundial en educación de negocios, el OneMBA (Tecnológico de Monterrey) se ubicó en el lugar 34 a nivel mundial de los 100 programas clasificados”[1], éste tipo de evaluaciones tienen un mayor alcance, ya que no valoran únicamente aspectos del programa y eficiencia terminal, sino que además miden el porcentaje de aceptación de los egresados al mercado laboral, el salario promedio de los egresados y el porcentaje de incremento de ingresos de los egresados después de concluir el posgrado.   Este es un sencillo ejemplo, de cómo la SEP podría utilizar alguna metodología existente a nivel mundial para elaborar procedimientos que le permitan de manera práctica evaluar los programas educativos y elevar calidad de la educación en todos los niveles.

El tema de calidad de la educación no tiene una relación proporcional positiva con el tiempo del programa de estudios, en España, los posgrados (Master), tiene en promedio un duración de un año escolar, y en la encuesta anteriormente citada, uno de sus programas se encuentra entre los primeros 10 lugares a nivel mundial; esto nos permite comprobar que el tiempo no es determinante para que el proceso de enseñanza-aprendizaje se lleve a cabo de manera correcta.

En los últimos años el tema de calidad de la educación, se ha estudiado a través de la gestión de la calidad con base del enfoque de competencias, Tobón (2006), afirma, que para se puede genera un cambio hacia la gestión de la calidad del aprendizaje en las universidades, es central que haya actitud de cambio en sus integrantes. Esto implica comprender las tendencias sociales, económicas, políticas y empresariales para tomar conciencia de la necesidad del cambio,  capacitar a todos los integrantes en el enfoque de competencias; y asumir el compromiso de transformar los procesos académicos incorporando los conceptos y metodologías del enfoque de competencias.  Si éste cambio no se logra, será muy difícil que se logre una política de “calidad integral” en una institución.

Con esto podemos llegar a las siguientes conclusiones, la SEP al omitir su función de evaluación a fondo de los planes y programas, está adoptando una visión cuantitativa de la educación, que genera: mayor oferta de profesionistas, abarata la educación y deja en manos de las Universidades la responsabilidad de la calidad en la educación, concepto que se ha modificado a lo largo del tiempo, hasta llegar a conocerlo, hoy en día  como gestión de la calidad, el cual  tiene su base en el enfoque de competencias.

 

Fuentes de consulta

-       Pisani, O. & Tovar, M. (1985). Evaluación de planes de estudio en Instituciones de educación Superior: Un problema central de la investigación educativa. Revista de Educación Superior. No. 54. ANUIES.

-       Tobón, S. & Rial. A. (2006). Competencias, calidad y educación superior. Bogotá: Cooperativa Editorial Magisterio.

-       Villa, J.E. & Parada, E. (2004). Manual para el rediseño de planes y programas en el marco del Nuevo Modelo Educativo y Académico. DF: Instituto Politécnico Nacional.

-        Global Executive MBA Ranking 2015 de “Financial Time”; http://rankings.ft.com/businessschoolrankings/executive-mba-ranking-2015.

-        

 

 



[1] Global Executive MBA Ranking 2015 de “Financial Time”; http://rankings.ft.com/businessschoolrankings/executive-mba-ranking-2015.
 

sábado, 7 de noviembre de 2015

ESTILOS DE APRENDIZAJE COMO META DEL MODELO EDUCATIVO CONTEMPORANEO ¿FORTALEZAS O DEBILIDADES?

ESTILOS DE APRENDIZAJE COMO META DEL MODELO EDUCATIVO CONTEMPORANEO  ¿FORTALEZAS O DEBILIDADES?

María Esperanza CANTORAL TREJO

Hablar de la educación y el aprendizaje, es tratar un tema complejo, ya que en el convergen diversos factores,  tanto para el alumno como para el profesor, dificultando aplicaciones de orden general, dado que el aprendizaje se refleja tanto en la forma que respondemos al ambiente que nos rodea, a los estímulos sociales, emocionales y físicos, el bagaje cultural, la edad, la preferencia del trabajo individual o colectivo, así como la motivación que el alumno tenga para aprender, todo esto nos permite entender y procesar nueva información.
Hasta hace poco, ya entrado el siglo XX, el tipo  de educación giraba en torno al modelo tradicional de enseñanza-aprendizaje, este modelo correspondía a la teoría educativa conocida como conductismo, dicho modelo exaltaba la enseñanza y situaba como núcleo del proceso educativo al docente, en torno al cual giraba todo el proceso educativo. Los alumnos eran tratados solamente como receptores de los conocimientos expuestos en clase.
Ya para finales del siglo XX se realizó una revisión de la pertinencia de continuar con la educación tradicional y se evidenció que este modelo educativo había dejado de ser conveniente, que los alumnos no solo no estaban entusiasmados con los estudios, sino que,  no respondían a los nuevos requerimientos que los empleadores requerían, no contaban con las capacidades suficientes para su vida laboral; además se observó que las universidades estaban desvinculadas del sector productivo.
Fue a partir de que la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) recomendó que el modelo educativo debía orientarse al alumno y al  aprendizaje, según la teoría constructivista, preparando a los alumnos para enfrentarse al ambiente laboral actual; emitió una serie de recomendaciones para las organizaciones educativas y enfatizó que la educación debía promover el saber ser, saber conocer, saber hacer y saber convivir, desarrollando con ello una educación integral personalizada.
Para lograr lo anterior, los docentes se ven obligados a adquirir competencias didácticas, entendidas como la capacidad de enseñar a otro a aprender de por vida. Para Laura Frade, la competencia didáctica está íntimamente articulada  con ocho capacidades que interactúan entre sí para dar como resultado la óptima formación de los educandos (Frade, 2007): Capacidad diagnóstica: capacidad de detectar las necesidades de aprendizaje del alumno y relacionada con la determinación de los estilos de aprendizaje de los estudiantes que más adelante permitirán diseñar las estrategias de enseñanza adecuadas para el aprendizaje; Capacidad cognitiva: capacidad que guarda relación con la adquisición del conocimiento que necesita el profesor para el desarrollo de los contenidos temáticos de sus diferentes asignaturas; Capacidad ética: capacidad que incide en la toma de decisiones por parte de los docentes sobre su compromiso ante la sociedad, la responsabilidad al impartir sus clases, los valores que promoverá, los juicios de valor que emitirá, la priorización del desarrollo de los alumnos, la preocupación sobre su futuro laboral; Capacidad lógica: capacidad para organizar el contenido de la enseñanza de una manera lógica-secuencial. Se demuestra mediante la organización, ordenamiento, graduación y dosificación de los contenidos conforme a lo detectado mediante la capacidad de diagnosticar; Capacidad empática: capacidad que permite entender a los alumnos en tres diferentes planos: afectivo, cognitivo y psicomotriz; Capacidad comunicativa: habilidad para lograr la mediación entre el aprendizaje y la enseñanza. Corresponde a la utilización de los diferentes tipos de lenguaje que posibiliten al estudiante apropiarse del conocimiento y hacer su propia construcción significativa, lo que les permitirá aprender para la vida; Capacidad lúdica: capacidad que permite diseñar y aplicar diversas estrategias de enseñanza-aprendizaje; y Capacidad metacognitiva: capacidad para evaluar el proceso enseñanza-aprendizaje en dos vías: hacia los alumnos verificando avances y estableciendo medidas correctivas, pero además hacia su propio desempeño como docente, lo que le permitirá mejorar día a día en su profesión.
Por consiguiente, desde el punto de vista tanto del alumno como del profesor, el concepto de los estilos de aprendizaje resulta relevante porque ofrece grandes posibilidades de actuación para conseguir un aprendizaje más efectivo, que es, precisamente, la meta del modelo educativo contemporáneo.
El concepto de los estilos de aprendizaje está directamente relacionado con la concepción del aprendizaje como un proceso activo, acorde con la teoría constructivista del aprendizaje en donde éste requiere de la manipulación de la información, por parte del receptor, para lograr conocimientos.
Los estilos de aprendizaje se centran en las fortalezas y no en las debilidades. No existe correcto o incorrecto estilo de aprendizaje. Los modelos existentes sobre estilos de aprendizaje ofrecen un marco conceptual para entender los comportamientos observados en el aula, los cuales brindan una explicación sobre la relación de esos comportamientos con la forma en que están aprendiendo los alumnos y el tipo de estrategias de enseñanza que pueden resultar más eficaces en un momento determinado, ya sea por el contendido temático en sí, o bien por las diversas interacciones sociales que se desarrollan en el aula. Así mismo, son útiles para que los alumnos comprendan cuáles son las mejores estrategias de aprendizaje que les conviene seguir para que su rendimiento sea óptimo.
Ya que todas las personas emplean un método particular de interacción, aceptación y procesado de estímulos e información, podemos deducir que los procesos de aprendizaje de los alumnos no son estandarizados y, por lo tanto, las estrategias que diseñamos los docentes no deberían ser iguales para todo el alumnado.
Los estilos de aprendizaje resultan ser ricos en explicaciones para apoyar las clases de los profesores por que pueden adaptar mejor su estilo de enseñar al estilo de aprender de sus alumnos. Las dificultades de la enseñanza –aprendizaje se derivan de una falta de adaptación de los estilos de enseñar empleados por los profesores que no tienen en cuenta los estilos de aprender de los alumnos receptores de su labor docente. Para poder proporcionar una educación integral e individualizada acorde con las nuevas teorías del aprendizaje y, derivado de ellas, los modelos educativos contemporáneos, los docentes deberán aprender a realizar diagnósticos que incluyan estrategias y estilos de aprendizaje.

FUENTES DE CONSULTA

Alonso, C. & Gallego, J. (1994). Estilos individuales de aprendizaje: implicaciones en la conducta vocacional. En Rivas, F. (ed.), Manual de Asesoramiento y orientación vocacional. Madrid: Síntesis.

Burón, J. (1996). Enseñar a aprender: Introducción a la metacognición. Bilbao: Ediciones Mensajero.

Frade, L. (2007). Inteligencia Educativa. México: Mediación de la calidad.

Valenzuela, A., & González A., (2010) “Cambio educativo: Innovación, Estrategias, Formación, Estilos de Aprendizaje y Competencias Profesionales” la reflexión desde la práctica. Perspectivas y Retos de la Educación Tomo II. MEXICO: UNISON.

Dunn R. y Kenneth Dunn (2008) “Modelos y Es tilos de Aprendizaje” disponible en: http:www.learningstyles.net. Consultado 05-10-2015.

Tünnermann, C; DE Souza, M. Desafío s de la Universidad en la Sociedad del
Conocimiento, Cinco Años después de la Conferencia Mundial sobre Educación Superior. UNESCO. [En línea].2003. [Ref. Nov. 2006] Disponible en Internet. http://unesdoc.unesco.org/images/0013/001344/134422so.pdf

Revista Estilos de Aprendizaje, nº6, Vol. 6, octubre de 2010. Disponible en: http://www.uned.es/revistaestilosdeaprendizaje/numero_6/articulos/lsr_6_articulo_7.pdf


COMO PRIMER PASO PARA LOGRAR LA TRANSFORMACIÓN EN LA EDUCACIÓN SUPERIOR:   LA CONCIENCIA Y LA RESPONSABILIDAD

Marisol PÉREZ LÓPEZ
La Educación como un acto de conciencia y responsabilidad para el progreso de todos. Debido a su  gran importancia, se busca la reflexión en torno a la educación a nivel superior y la necesidad de cambios estructurales para transformar la forma de enseñanza, a fin de formar profesionales que estén preparados para enfrentar los nuevos tiempos.
La justificación de  la necesidad de los cambios estructurales partiendo del modelo de enseñanza, es porque nuestro modelo tiene su origen y se remonta a los tiempos de Porfirio Díaz, cuando Justo Sierra ocupaba el Ministerio de Instrucción pública. Justo sierra copió el modelo promovido por Horace Mann “padre de la educación pública de los Estados Unidos”, desde entonces, el modelo subsiste y resiste en muchos países, Horace Mann convenció al Congreso de Estados Unidos de que la educación era tan importante para el desarrollo del país que el gobierno debía encargarse de su  control  y funcionamiento total. Por lo que se llega: que el gobierno decide lo que la gente debe saber. [1]
Dejando un lado las instituciones públicas,  vamos a lo privado, todas las escuelas, y universidades del país sigue lineamientos y programas de estudios que determinan algunas de las universidades del estado, a través de la  Secretaria de Educación Pública (SEP), para no ir más lejos,  la Universidad Autónoma de México (UNAM), ha sido gran influencia para muchas instituciones, en su mayoría tienen  puntos referentes de su  estructura en planeación de estudios. Las escuelas privadas funcionan bajo el permiso, supervisión, y evaluación del estado. [2]. Si el estado considera que no cumple con lo requerido o contrapone a sus  intereses, tiene el derecho de cancelar su permiso de funcionamiento, deduciendo a algo, “el monopolio educativo”.  
Por ello es necesario impulsar y establecer libertad para la construcción de nuevos paradigmas de aprendizaje, nuevos métodos de enseñanza,   nuevas ideas, cambios estructurales para transformar la manera tradicional de enseñanza, así como  fortalecer la participación de los universitarios, proporcionar herramientas, combinando lo conceptual con ejemplos prácticos, que fortalezcan sus propios criterios y pensamientos, desarrollar  técnicas  de enseñanza y el aprendizaje del alumno. En los últimos años se han presentado propuestas de nuevas  formas de enseñanza en la educación superior, se ha enfatizado un interés evidente  en cuanto a la enseñanza del derecho, dado que la materia es en su mayoría es teórica, representa dificultades,  por lo que a veces el alumno opta un papel pasivo y solo receptor de información, es ahí la  importancia de combinar lo teórico con la práctica.
Por lo que cobra importancia  las propuestas de la enseñanza activa del derecho, como es el método de casos que fuerza al estudiante a entrar en dinámica y a pensar por sí mismo,  en cuantos el método de problema, enfrenta al alumno en la búsqueda de  una solución  al problema planteado [3]. La deficiencia de la calidad de la educación superior no solo lo presenta esta disciplina, si no la mayoría de las licenciatura, por lo que para mejorar el nivel de educación superior, se necesita redoblar los esfuerzos por buscar estrategias,  modelos de en enseñanza y aprendizaje, para capacitar al estudiante y sea un profesionista capaz de solucionar los problemas que se le presentaran en la vida diaria. 
Dicho la anterior se reconoce que hay personas preocupada por la educación y hay buenas propuestas para fortalecer la educación en nuestro país, pero existe un gran obstáculo,  el  miedo al cambio, puede existir las mejores propuestas, los mejores modelos pero si no se está dispuesto y se teme al cambio, es ahí una labor de todos nosotros de crear conciencia. Los tiempos cambian, el mundo de hoy es tan diferente que el de hace 15 o 20 años, los tiempos son más difíciles, exigen mayor competitividad, mayor preparación para estar al nivel y competir con los problemas actuales, es por ello que se exige  un cambio de mentalidad para la elección de las mejores estrategias que permitan el cambio, es difícil cambiar una costumbre tan arraigada que hemos venido cultivando. Sin embargo el cambio es necesario,  en la actualidad se presentan nuevos retos, tanto tecnológicos, como el aprendizaje de otro idioma para lograr mayor competitividad  y tener mejores propuestas de trabajo esto es en cuanto al alumno, en cuanto a   instituciones  educativas se han convertido en seguidores de partidos políticos, la fuerzas sindicales que parece no importarle mucho la educación, que se niegan al cambio. Es un reto bastante complicado porque difícilmente se podrá convencer a todos.
Por lo que  tenemos que cambiar nuestra actitud mental, los protagonistas del cambio somos todos, no solo el gobierno, no solo el dirigente de una escuela, somos todos, todos tenemos y  debemos de asumir nuestra  responsabilidad. Crear conciencia tanto en el profesor  como en el alumno, porque  en una gran  mayoría de las universidades tanto públicas como privadas,  los alumnos hacen como que estudian y los profesores como que enseñan.  El cambio de mentalidad es un factor muy importante, que los profesores estén en la libertad de dar  lo mejor de sus conocimientos adquiridos,  en los planes de estudios que se  tenga la libertad  de modificar, ampliar o renovarlo siempre que se crea beneficiosos.  Para que esto funcione se necesita el compromiso del profesor y del alumno, cambiar la forma de pensar del alumno que no solo está ahí para aprobar las materias si no de hacerse de un conocimiento y en base a eso construir su propio conocimiento, de identificar sus capacidades, habilidades y destrezas que le permitán desarrollarse como profesionistas.
Se requiere un cambio emergente debido a la baja preparación de los estudiantes universitarios porque el no tener iniciativa, el estar desfasado en las materias de estudios, no saber hablar en público, el no saber manejar conflictos o equipos de trabajo, una de las grandes verdades es que en la universidad no está la cultura de enseñar a redactar al estudiante, el desinterés de aprender por sí mismos, es por ello la referencia que la educación es un acto de conciencia y responsabilidad  en todos nosotros para avanzar y lograr un cambio verdadero, para que los nuevos modelos, métodos, estrategias para mejorar la enseñanza y el aprendizaje se tomen de la mejor manera, no como una imposición, más bien como una trasformación para el beneficio de todos. Indistintamente, las acciones y los tipos de estrategias pedagógicas que  utilicen, es necesario crear un compromiso, tener conciencia y responsabilidad para con nosotros y la sociedad, nada funcionaria si en nosotros no existiera un cambio de mentalidad.
Fuentes de consulta:

MERCADO REYES, Santos. (2013). Un Voucher Para La Educación. Fundación Friedich Nouman para la Libertad.

WITKER, Jorge. (1985). Técnicas de la Enseñanza del Derecho. UNAM: Instituto de Investigaciones Jurídicas, PAC.


---------------------------------


[1] Mercado Reyes, Santos. (2013). Un Voucher Para La Educación. Fundación Friedich Nouman para la Libertad, (pp.11).

[2] Mercado Reyes, Santos. (2013). Un Voucher Para La Educación. Fundación Friedich Nouman para la Libertad, (pp.13).

[3] Witker, Jorge. (1985). Técnicas de la Enseñanza del Derecho. UNAM: Instituto de Investigaciones Jurídicas, PAC. (pp.130).



LA EDUCACIÓN COMO DERECHO HUMANO DE LAS MUJERES
Por Maricela Hazel PACHECO PAZOS
Hablar de educación, es abordar un tema con muchas aristas, el cual puede ser observado con distintos “lentes”, podemos, por ejemplo, referirnos a ella desde un aspecto eminentemente pedagógico cuando hablamos de los planes y programas de estudios, las estrategias y métodos de aprendizaje, entre otros;  también podemos hablar de ella desde una perspectiva política, o podemos hablar de ella desde un ámbito social, y particularmente, en esta ocasión, quiero referirme a ella como un Derecho Humano, qué implicaciones conlleva de acuerdo con los instrumentos internacionales de protección de Derechos Humanos y como se aplica este derecho a las mujeres.
La Declaración Universal de Derechos Humanos establece en su artículo 26.1 el derecho a la educación, en los siguientes términos: “Toda persona tiene derecho a la educación. La educación debe ser gratuita, al menos en lo concerniente a la instrucción elemental y fundamental. La instrucción elemental será obligatoria. La instrucción técnica y profesional habrá de ser generalizada; el acceso a los estudios superiores será igual para todos, en función de los méritos respectivo”
Como se puede observar, este derecho a la educación parte del principio de igualdad, es decir que no se debe hacer diferencia por ninguna razón, por ejemplo por razón de género, pero para que ello fuera así, fue necesario la lucha de diversos sectores de la sociedad, pues, como sabemos la educación en un primer momento solo era para los hombres que pertenecieran a las clases sociales altas, poco a poco se fueron abriendo espacios para hombres de otras clases sociales, sin embargo el acceso de las mujeres ha sido más complicado, las mujeres hemos tenido que luchar por ser admitidas en las escuelas, pues con anterioridad se pensaba que las mujeres éramos inferiores intelectualmente porque  nuestro cerebro pesaba menos que el de los hombres[1], y por ello no nos era permitido acceder a la educación básica. En el caso de la educación superior no ha sido diferente, es un hecho innegable que hasta hace algunos años no se permitía el acceso de las mujeres a una educación profesional, con el tiempo se fueron abriendo espacio pero solo en ciertas carreras tal es el caso de enfermería, educación preescolar, entre otras que estuvieran relacionadas principalmente con el cuidado; por el contrario no estaba permitido que las mujeres estudiaran carreras como las ingenierías, que estaban diseñadas exclusivamente para los hombres. En el caso de la Licenciatura en Derecho, la historia ha sido complicada también para nosotras las mujeres, pues hace algunos años esta carrera estaba dominada por hombres, sin embargo en la actualidad ha mejorado el ingreso de mujeres a esta carrera, según estadísticas América Latina es la segunda región- después de Europa Oriental- en la que más mujeres estudian Derecho y Administración de Empresas.[2] En nuestro país específicamente,  el porcentaje de hombres y mujeres estudiando la Licenciatura en Derecho es igualitario, pues el 49.2% de los estudiantes son hombres y el 50.8 son mujeres.[3]
            Con las estadísticas anteriores podemos afirmar que en nuestro país, en materia de Derecho a la Educación,  se cumple con el principio de igualdad, por lo menos en cuanto al género se refiere, sin embargo, ¿el derecho a la educación implica únicamente el principio de igualdad? La respuesta definitivamente es no. De acuerdo con el artículo 26.2 de la  Declaración Universal de Derechos Humanos que fue citada en párrafos anteriores: “La educación tendrá por objeto el pleno desarrollo de la personalidad humana y el fortalecimiento del respeto a los derechos humanos y a las libertades fundamentales; favorecerá la comprensión, la tolerancia y la amistad entre todas las naciones y todos los grupos étnicos o religiosos, y promoverá el desarrollo de las actividades de las Naciones Unidas para el mantenimiento de la paz”.
            En el Sistema Americano de Derechos Humanos, la Declaración Americana de los Derechos y Deberes del Hombre, señala en su artículo XII que “Toda persona tiene derecho a la educación, la que debe estar inspirada en los principios de libertad, moralidad y solidaridad humanas. Asimismo tiene el derecho de que, mediante esa educación, se le capacite para lograr una digna subsistencia, en mejoramiento del nivel de vida y para ser útil a la sociedad.
De los preceptos anteriores quiero rescatar específicamente algunos aspectos que me parecen fundamentales para pueda hablarse de un derecho a la educación profesional de las mujeres de una manera integral. El primero de ellos es el que se refiere a que el objeto de la educación es el pleno desarrollo de la persona humana lo cual está estrechamente relacionado con el logro de una digna subsistencia, en mejoramiento del nivel de vida y ser útil a la sociedad;  y aunque en este punto, sin duda, cada uno de nosotros tendremos diversas opiniones respecto de lo que es el desarrollo de la persona humana,  podemos coincidir en que estos tres aspectos: tener una digna subsistencia, es decir tener económicamente lo necesario, el mejoramiento del nivel de vida que se puede lograr a través del aspecto anterior, producen en las personas ese sentimiento de utilidad a la sociedad que le permite a las personas, en este caso específicamente a las mujeres un desarrollo pleno.
Finalmente el aspecto que tiene que ver con el fortalecimiento de los Derechos Humanos y con ello se materializa el principio de interdependencia de los Derechos Humanos, que establece que estos derechos no son aislados, por el contrario son integrales y el avance o desarrollo de uno implica el desarrollo de los demás.
Finalmente, termino con esta frase de Catherine Stimpson, que encierra lo que para las mujeres representa el acceso a la educación “para nosotras la educación es un medio necesario para lograr la autonomía, dignidad, igualdad, autosuficiencia, poder e, incluso con suerte, placer”[4]


FUENTES DE CONSULTA

AZIZE, YAMILA, (1996) Mujeres Latinoamericanas y Educación en el fin de siglo, Costa Rica, IIDH, 167
PÉREZ HURTADO, Luis Fernando, (2009)  La futura generación de abogados mexicanos, un estudio de las Escuelas y los estudiantes de Derecho en México, 216

Declaración Universal de los Derechos Humanos aprobada 10 de diciembre de 1948.
Declaración Americana de los Derechos y Deberes del Hombre Aprobada en la Novena Conferencia Internacional Americana Bogotá, Colombia, 1948



[1] Waleska Lemoine, (1994) Perspectivas históricas sobre la mujer y la ciencia» en Mujer y Ciencia: Investigación y Currículo Pág. 9-32 en Azize , Yamila, (1996) Mujeres Latinoamericanas y Educación en el fin de siglo, 145
[2] United Nations. The world’s Womwn 1995: Trends ands Static. New York. 1995 32 en Azize , Yamila, Op. Cit. Pág. 144
[3] Pérez Hurtado, Luis Fernando, (2009) La futura generación de abogados mexicanos, un estudio de las Escuelas y los estudiantes de Derecho en México, pág.   66
[4] Catherine Stimpson, Jabalís y otras cosas por el estilo: sufrimientos, logros, y educación de las mujeres,  en Educación y Género: una propuesta educativa. Ediciones la Morada, 1993, pág. 176,  citado por Yamila Azize Op. Cit.